Política y ocultismo.
Cuando los gobernantes atan a sus países al mundo de las tinieblas.
Reportaje Edición No. 134 Nov. De 2.010
Periódico Valores Cristianos/ Colombia.
www.valorescristianos.net
Dir.: Mag. Gonzalo Guzmán.
El hombre se quita cuidadosamente el traje de sastre, desanuda la corbata, la dobla cuidadosamente y la coloca sobre una mesa de madera rústica. En la distancia se escucha el canto de los pájaros y un fuerte olor a incienso invade la estancia. Un murmullo de voces acompasa el ambiente mientras que un flash de una cámara fotográfica, ilumina el espacio en una fracción de segundos que parecen una eternidad. Un día cualquiera, en un lugar distante, muy alto en las montañas por donde sale el sol en las mañanas todavía adormilado, anunciando el nuevo día.
El chamán con aire de solemnidad, se acerca para ofrecerle una pócima. El mandatario la bebe lentamente, percibiendo el amargo de las yerbas y, muy lejano en su percepción gustativa, el dulce de alguna planta amalgamada para hacer más fácil el consumo.—Ahora repita conmigo…- le dice el sacerdote que preside aquella celebración con tintes indígenas y ocultistas.
Ambos, Presidente y oficiante, elevan su voz con frases que para algunos de los asistentes resultan incomprensibles, pero que revisten un profundo significado para los participantes asiduos. En aquel momento, que resulta excéntrico para los políticos, curioso para los periodistas, muy noble para los lectores y televidentes, pero trascendente para los chamanes y sacerdotes aborígenes, el mandatario somete a su gobierno a la guía espiritual de dioses ancestrales… Y de paso, como cabeza de gobierno, entrega su territorio al dominio del mundo de las tinieblas…Resulta sorprendente que este fenómeno haya cobrado fuerza en América Latina, como desde la antigüedad fue una práctica común entre reyes, monarcas y presidentes de países europeos, orientales y asiáticos.
Presidentes latinoamericanos ligados a ceremonias rituales
Uno de los casos más recientes de mandatarios involucrados en ritos ceremoniales, es el de Juan Manuel Santos. El 7 de agosto pasado, antes de posesionarse ante el Congreso de la República, recibió un bastón de mando de manos de las autoridades espirituales de los pueblos indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta. La ceremonia se cumplió en Seyzhua, sitio sagrado de estas comunidades indígenas. El ritual fue privado y estuvo a cargo de los “mamos”, (sacerdotes) de las etnias arhuacas, kogui y wiwa de la kankuama. El mandatario recibió también dos “aseguranzas”, hilos de algodón que le fueron amarrados en las muñecas.
También en su momento los presidentes boliviano Evo Morales, Rafael Correa de Ecuador, en Haití, el ex sacerdote católico Jean Bertrand Aristide, presidente en el 2.001, emitió una resolución en la cual se inscribía el vudú en el ministerio de cultos, como práctica cultual aceptada. (Extracto resumido del reportaje).
Si asumimos una actitud pasiva, el enemigo seguirá ejerciendo influencia entre quienes están en eminencia y, por supuesto, sobre sus gobernados. “Así que recomiendo, ante todo, que se hagan plegarias, oraciones, súplicas y acciones de gracias por todos, especialmente por los gobernantes y por todas las autoridades, para que tengamos paz y tranquilidad, y llevemos una vida piadosa y digna. Esto es bueno y agradable a Dios nuestro Salvador, pues Él quiere que todos sean salvos y lleguen a conocer la verdad” (1Tim. 2:1-4).