En un gesto sin precedentes el ex presidente de Colombia Álvario Uribe Vélez se solidarizó en Cúcuta con los colombianos deportados desde Venezuela y anunció que como una muestra más de su “corazón grande” está dispuesto a regalar sus fincas de Córdoba y Antioquia a efectos de hacer menos traumática la situación calamitosa de quienes han sido expulsados del vecino país.

Acompañado de cientos de militantes del Centro Democrático y de miles de espontaneos que corearon hasta el cansancio su nombre, el ex presidente y Senador de la República con un megáfono en la mano y dando muestras evidentes de liderazgo dijo que era lo menos que podía hacer e invitó a otros miembros de su partido y a personas acaudaladas a seguir su ejemplo.

No obstante, Uribe fue enfático en señalar que habrá filtros rigurosos pues no tolerará que Maduro, con la complicidad de Santos, deporte o infiltre guerrilleros que puedan terminar apropiándose de las tierras productivas que con tanto sudor y esfuerzo de años logró acumular su familia de manera honesta y transparente. "Estoy dispuesto a ofrecer todas mis tierritas pero solo a los deportados y a las víctimas de las FARC" sostuvo.

Uribe Vélez sugirió como una fórmula para lograr la pronta adaptabilidad de los deportados, que los oriundos de la costa sean ubicados en sus haciendas de Córdoba mientras que sugirió que los oriundos de la región andina podrían ser ubicados en territorio del Departamento de Antioquia. “Lo que se nos viene es un reto habitacional grande, pero sin duda con la colaboración de amigos constructores como Alex Char solucionaremos este problema” dijo Uribe.

De acuerdo a analistas, con esta importante jugada maestra Uribe Vélez estaría atravezándosele al presidente Santos en sus aspiraciones de obtener elPREMIONobel de la Paz, pues de manera anticipada el considerado por sus gestas como el gran colombiano, podría obtener -antes de la firma de los acuerdos de paz- este importante galardón y reconocimiento que lo ubicaría sin duda alguna como el hombre más importante de la historia en nuestro país.

Por su parte, contradictores políticos de Uribe Vélez, de tendencia política castro-chavista-santista, descalificaron el gesto altruista y humanitario del máximo lider del Centro Democrático señalando que detrás de su anuncio se esconden intenciones oscuras que podrían fragmentar la unidad territorial del país.

Un allegado al actual gobierno, que pidió reserva de identidad, señaló a este medio que hay información de fuentes humanas confiables y cercanas a la Casa de Nariño, de que frente a una eventual firma de la paz con la guerrilla, Uribe Vélez estaría planeando constituir un nuevo país integrado por los departamentos de Córdoba y Antioquia que en su honor llevaría el nombre del ex mandatario, pero que personas afines al gobierno llaman despectivamente “Uribelandia”.

De acuerdo a esas mismas fuentes detrás de la intentona uribista habría intereses hegemónicos internacionales interesados en contrarestar el canal interoceánico que pretenden construir los chinos en Nicaragua, adelantándose a los planes comunistas mediante la construcción de un nuevo canal que integre los Oceános Pacífico y Atlántico pero a través de unir los rios Atrato y Truandó.

Un allegado al ex presidente subrayó que en el evento hipotético de que fueran ciertos los planes del uribismo, el país debe tener la certeza de que lo que se quiere es un nuevo país sin guerrilla, sin paramilitarismo, sin corrupción y sin narcotráfico en el que quepan todos los uribistas y en el que se pueda dar cabida a todos los hermanos del mundo que odien a Maduro, los hermanos Castro y a los Santos.

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